
Perdónenme ustedes esta digresión, pero es que … verán, cómo se lo diría yo … bueno, empezaré por el principio: estoy apuntada a una actividad que –como me recomendó mi profesor de tai’chí- me viene muy bien para mi desarrollo espiritual y tal y cual … Viene consistiendo en una reunión de más o menos frikis … al menos como yo de frikis … uy, ¡que me estoy perdiendo! … decía, que nos reunimos para leer los cuentos que llevamos hechos de casa … algunos son güays, y otros –como los míos- digamos que no van a ganar un concurso, las cosas como son.
Para pasar la tarde del domingo, no está mal, aunque un punto de reunión de propietarios sí que tiene, pero bueno … ya sabemos que nada ni nadie es perfecto. Pues eso, que tengo que escribir no más de trescientas palabras y …
(Suena un timbre)
—Síii digaméeeee
(silencio)
—Ya le abro.
Perdón, era el cartero.
Decía que hay que escribir un relato, inspirándose en una foto de abuelita –por cierto: calcada a la mía- …. Pero no acaba ahí la cosa … hay que meter a un famoso o famosa en la redacción … coño con perdón: haré una narración en primera persona, porque más famosa que yo, mal está que lo diga, hay pocas … no en vano me conocen por ahí, como la Chelito.