A veces invierno. A veces abrazo. Como el odio. Como
el beso. Brizna salvaje. Bandada de besos en el asfalto rojo de mis huesos. Aterciopelada esencia la de su verde oleaje. Con la sal en las rodillas. Ensimismado. Como el verso herido. Como la luz del tallo. Y la vida. Dando gracias