No es nada original decir mi fobia. Es bastante común…Mi enemiga esa negra, destinada a morir con un zapatazo o con un escobazo… Y siempre con el odio de ¡qué asco!, sin piedad.
La Cucaracha. Sí, tuve una experiencia una vez en mi infancia en aquel caserón de Huertas; cuando sentada en la mesa note un leve cosquilleo… y con horror vi a aquella repugnante cucaracha que buscaba su calor entre mis muslos. Salté horrorizada. Desde entonces no puedo ni pensar en ellas. Lo siento pues no tienes la culpa de la repugnancia que me provocas y sé puede decir : María de la O que desgraciaita que tienes cucarachita maldita María de la O. Siempre muriendo con oído con asco y con tanto horror.