Premisas:

• Un camello de dibujos animados
• Arnold Schwarzenegger
• Racismo

Padezco una variante rara de daltonismo que me impide distinguir bien los colores, a excepción del blanco y del negro. Es una de esas enfermedades improbables que la ciencia se apresura a bautizar con el nombre del propio primer paciente. En este caso, el mío: Schwarzenegger.

Mi déficit visual no me ha impedido desarrollarme plenamente como persona. Soy biólogo y trabajo en un zoológico. Mi currículum me hace apto para trabajar con todo tipo de animales, siempre que sean blancos y negros. Es decir: cebras, osos panda, orcas, pingüinos y vacas (siempre y cuando sean de la raza frisona). Sólo animales dicromáticos… Y el camello de mi paquete de cigarrillos.

De las cebras aprendí que no son blancas con rayas negras, sino negras con rayas blancas. Aprendí también que las cebras no son caballos con rayas, sino que los caballos eran cebras que fueron perdiendo sus rayas con el tiempo. Así que, ¿acaso importan los colores?

Por eso no soy racista… Bueno, excepto con las vacas.