Esto empezó con una caja de chocolates,

bombones baratos del supermercado Día.

El paro no da para dispendios de pastelería

de esas pijas, caras y con escaparates.

 

Yo me dejé cortejar sin flechazo

Porque mi horizonte era… escaso.

Empezamos a salir acaso

y en un bar estrechamos el lazo.

 

Las únicas flores que me regalaste

todavía no se habían marchitado,

y tú ya me habías abandonado.

Con otra más joven te largaste.

 

Segura de pertinaces sequías,

ni siquiera en la basura las enterré,

solo en un tiesto, rabiosa, las tiré

para olvidar que ya no me querías.

 

Supongo que era un pivón,

con escueta minifalda y tacón,

¿quizás sin mucha conversación?

Te portaste como un auténtico cab…

 

Lo arrojado sembró semillas inopinadas.

Yo confiaba en las sequías cacareadas,

pero tengo una maceta con un brote,

plugo que no se me abarrote.

 

Porque no te pienso recordar

Solo disfrutar, disfrutar…

¿Te he dicho que voy a dejar secar el maldito

brote superrequeteverdecito?

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *